Crónica XI Media Maratón Puertos de Las Palmas

Es complicado presentarse a una carrera en la que estás convencido de que puedes hacer tu mejor marca. Aparte de los factores externos que no puedes controlar (clima, salud, perfil del circuito...), sabes de antemano que vas a sufrir y que en algún momento de la carrera te vas a encontrar en una situación en la que no has estado antes. Es lo que tiene tratar de romper tus límites, puede que los rompas o que te des cuenta que ese día el límite es exactamente eso, tú limite.

Hay pequeños detalles que, a pesar de no dejar de entrenar para el próximo maratón, revelan que esta carrera la había marcado como "la carrera". Me levanté tres horas antes y seguí la rutina de los grandes días, o sea, de los maratones. Saqué de la caja a "las rubias", con el objetivo de limar tiempo incluso por el peso de las zapatillas, a pesar del riesgo que suponía al no haber hecho más de 10km con ellas. Por último, me grabé en la mano los tiempos de paso objetivo para batir mi marca (1:36:07) y bajar de 1:35. Toda una declaración de intenciones.

Tecnología al poder

La previa de la carrera fue muy entretenida, así que no hubo tiempo para ponerse nervioso. Recién llegado a la zona de la salida pude conocer a Álvaro (El velofondo), que nos hacía una visita para demostrarnos lo que es correr rápido. Seguidamente fue apareciendo el resto de la fauna blogger del lugar, por suerte, a los que no vi antes de la carrera, los saludé al final así que no me quedó nadie pendiente.

Hice el calentamiento con Iván, que esa mañana se empeñó en que le pusiéramos un dorsal bajo amenaza de reventarnos los tímpanos a lloros. Una pasada lo que corrió, todo un espectáculo. Para colmo, cuando le dije que tenía que volver con Marian, nueva perreta porque quería seguir corriendo. Desde luego algo se le ha pegado.

No hay quien le pare

En la salida, como siempre en estos casos, la gente se coloca como quiere o como sabe, así que a pesar de estar delante me comí los típicos tapones, aunque nada que fastidiara mi ritmo inicial. Los primeros kilómetros me pongo detrás de una pareja de corredores del CARUCAT, a la chica la conozco de verla en los podios y pienso que es un buen ritmo a seguir. La verdad es que me sorprendió el ritmo que llevaban, así que fui haciendo la goma hasta el kilómetro 5, momento en el cual mi marcha empezó a ser mejor que la del grupo. El ritmo estaba sobre 4:24/km, mejor de lo que tenía pensado.

Muchos conocidos juntos en los primeros kilómetros
Gonzalo (331), Jose Alberto(8) y yo(362)
FOTO: Bichillo Runner

A partir de aquí tocaba la parte más dura de la carrera, durante cuatro kilómetros había que pelear contra el viento y el desnivel del terreno, a estos dos factores se añadió el sol que ya no nos abandonaría hasta el final de la prueba. No son grandes cuestas pero si largas, en una tirada de fin de semana las pasaría sin problemas, pero al ritmo que llevaba en carrera las pulsaciones se descontrolaban y los músculos sufrían más de lo que me hubiera gustado a esas alturas. De todos modos aguanto por debajo de 4:30 y en los últimos tres kilómetros de la vuelta, en condiciones más favorables, bajo de 4:20.

Acaba la primera vuelta, y noto que ya me empieza a faltar el aire, en ese momento tengo muchas dudas de poder aguantar el ritmo y me planteo la carrera kilómetro a kilómetro. Teniendo en cuenta que llevo un minuto de adelanto a la referencia para terminar en 1:35, cada parcial debajo de 4:30 es una nueva victoria. Había ido más rápido de lo que pensaba, pero una vez metido en el lío era una estupidez dar un paso atrás.

Retorno a la zona complicada y ventosa del circuito sabiendo que tengo que apretar los dientes hasta que vea el cartel que marca el kilómetro 18. El ritmo ronda el 4:40 durante tres kilómetros pero no me dejo ir, sé que si aguanto esa parte lo tengo hecho.

Del 18 al 20 puedo ir razonablemente rápido (4:25-4:30) sin quemar demasiadas energías, así que reservo un poco para llegar con algo de pólvora al último kilómetro. Ese último kilómetro lo hago en 4:17, superando metros antes de llegar a la línea de meta a la ganadora de la categoría femenina. Sabiendo que en ese momento no soy el protagonista de la película, entro discretamente por la parte derecha del arco. Los aplausos iban para la ganadora, pero los hice míos cuando bajé la mirada y vi los siguientes dígitos: ¡1:33:26!

No me lo podía creer, 2 minutos y 41 segundos por debajo de mi anterior marca personal, con un ritmo medio de 4:26/km. Si alguien me vio, debió alucinar con el flipado asfixiado que levantaba los brazos mientras buscaba una sombra en la que protegerse del sol.

La clasificación, acorde con la marca, 85 de 427 en la clasificación general y 21 de 102 en mi categoría.

Esto es lo que pasa cuando no dejas correr a un runner

Hubiera firmado toda la carrera antes de salir de casa. Como siempre, salí a por más de lo que había pensado y, por una vez, aguanté hasta el final sin rendirme en ningún momento. Esta es mi forma de correr y, aunque muchas veces sale mal, el día que sale... joder el día que sale...

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Clasificación Media Maratón Puertos de Las Palmas
Clasificación Carrera Popular Africa Vive (10,5km)